Cristo al servicio de quién?

corrupcionEstá de moda ver cómo algunos pastores e iglesias se rinden a los pies de los políticos, alcaldes, diputados y otro referente del poder político y económico.  No hay duda, estos pseudo- lideres no han entendido que hay que llevar a los políticos a los pies de Cristo y no Cristo a los pies de los políticos.  Se les ha olvidado la mayor lección de Constantino y su alianza con el estado.

Cómo decían los Guaraguao: A Cristo hoy lo explotan los de arriba, ricos, iglesia y gobierno.  Los señores de una iglesia que está muy lejos del pueblo, que no sabe de miseria,  que no vive su evangelio…A cristo hay que liberarlo…porque ellos se lo han robado..Iglesia  que no denuncia la injusticia y la opresión, es una iglesia vendida.

El apostol Pablo decía: ¿busco ahora el favor de los hombres, o el de Dios? ¿O trato de agradar a los hombres? Pues si todavía agradara a los hombres, no sería siervo de Cristo. Gal 1:10

Un amigo pastor escribió:  El diablo se mueve de la misma forma.: “Todo esto te daré ,si postrado me adorares” ”Si comes del árbol, tus ojos serán abiertos y serás como Dios!”. Todavía hoy seguimos vendiendo nuestra primogenitura por un plato de lentejas! Que soruyos! para no decir. Que necios! Nos encanta la foto con el gobernante de turno.   Nuestra carne se regodea cuando los políticos se acercan diciéndonos: “Usted es el principal referente de los evangélicos en nuestra ciudad!”. Cuando aprovechamos algunas reuniones multitudinarias, para invitar a candidatos y gobernantes, demostrándoles nuestro PODER DE CONVOCATORIA! Y así lograr concesiones para nuestro propio beneficio.  Algunos tienen un corazón necesitado y sincero. Reconocen su “horfandad” espiritual. Otros, muchos otros, te dicen lo que tus oídos quieren escuchar, saben como conducirse en un ambiente religioso. Saben que ofrecerte para obtener de los “evangelistas” lo que ellos realmente están buscando.  He estado en ciudades llenas de iniquidad e injusticia. Y la voz profética de la iglesia ? Bien gracias!. Durmiendo la siesta de los pastores que fueron silenciados con este o aquel subsidio o favor gubernamental!.

Sigo pensando y viendo que los políticos son expertos en encarcelar a Cristo a sus gustos y a sus dádivas;  en vestirlo con ropas finas y poner en sus manos unos cuartones, laminas, cuadernos, piñatas y jugos a cambio de una decena de votos…Pero más políticos son los creyentes,  que quieren amar a Cristo y amar al mundo.

¡¡¡Ganga!!!! Vendo Iglesia.

ofertaNo se si fue en la carne o en el espíritu, no lo sé, pero he estado pensando en esta entrada desde hace algunos días.  Las palabras del Dr. Gerardo Alfaro, me terminaron de confirmar la evidente frustración de aquellos que se dedican a la enseñanza de la palabra desde una iglesia, aula u otro foro.  La gente no quiere cambiar!!!  No quieren nada con la palabra y su seriedad, compromiso, obediencia.  Generación a generación es lo mismo, desean más la «sopa de pollo» o la «aspirina».  Nos incluimos todos, seguimos siendo las bestias que alejados de la transformación de la palabra estamos destinados  a enredarnos más en las tinieblas de adentro. Aún así, no queremos la palabra. Y pensar que el panorama seguirá siendo así, por eso el título de esta entrada.

Dan ganas de vender la iglesia por muchas razones:

1. Vendo la iglesia, donde el pastor no es pastor, es un asalariado, interesado en cobrar lo más pronto posible su cheque de la quincena, que llamar, visitar u acompañar las ovejas en sus necesidades.

2. Vendo la iglesia, donde el pastor es un haragan, no quiere trabajar, quiere ganar más eso sí, más que algunos de los miembros de la iglesia que se revientan la espalda desde temprano para ir a sus trabajos a ganarse la décima parte de lo que él quiere ganar de sueldo.  No se da cuenta que es desvergonzado, abusivo, huevón y aprovechado.  Reparte cartas para pedir ofrenda y cobrarlas cada mes, pero es un inutil en el manejo de su agenda, de sus horas, de sus minutos, que casi siempre malgasta o durmiendo o haciendo cualquier otra cosa.

3. Vendo la iglesia, donde la esposa del pastor parece policía, confrontando, alineando, y acusando de pecados a las pobres hermanitas de la femenil que por falta de carácter dejan que se les suba la mál llamada «autoridad pastoral».  estas son las que andan queriendo enderezar la vida de toda hermana que aparezca en el camino, y no se dan cuenta que su casa, hijos, hijas, y cuanta familia tenga cerca, está patas arriba.

4. Vendo la iglesia, donde los lideres encargados de pastorear la iglesia no quieren saber nada de la reunión de oración, no oran, ni dejan orar.  Les encanta repartir la mesa del Señor, sesionar para acuerdos, pero no quieren pagar el precio de doblar sus rodillas y orar con el pueblo.

5. Vendo la iglesia, donde se le da más importancia a cómo suena el piano, o si la guitarra está afinada,  que la preocupación de la hermanita con tres hijos pequeños sin tener nada que comer a salir del concierto, digo, culto de alabanza.

6. Vendo la iglesia, donde los directores de alabanza, músicos y sonidistas, están más preocupados en cómo les quedó el planchado, el tinte, la corbata, que haber ayunado un día antes de alabar al Señor.

7. Vendo la iglesia, donde para poder sostener la cuota de la energía eléctrica, el alquiler del local, la cuota del carro del pastor, el viaje a Israel del pastor, se condena a la Iglesia que si no diezman, le están robando a Dios.

8. Vendo la iglesia, donde los hijos del pastor quieren ser vistos como «santos» olvidándose que son niños como cualquier otros con deseos de correr, jugar, reír, y una que otra vez tirarse un «aire» para carcajearse.

9. Vendo la iglesia, donde quieren que el pastor abrace a las ovejas, sin importar que predique mal, y sin importar que no abrace a su esposa e hijos, pero que en cada entrada de cada domingo, de cada culto este abrazando a la gente.

10 Vendo la iglesia, donde los jóvenes no quieren saber nada de la iglesia por la culpa de los adultos, del hno. Godofredo líder por año de los diáconos, caballero ilustre de la sociedad de caballeros, pero un adultero de primera; de la hnita. Mirna, consejera experimentada desde las convenciones de los 70, reconocida conferencista internacional, pero chismosa de primera, no hay pecado ni pecadora que se le escape, pone el ojo donde está el pecador, alcanzativa tipo la mujer elástica, ve maldad donde no la hay y si tiene la oportunidad de imaginarse lo imaginable se lo imagina.

jajajajajaja

¡¡¡¡Ganga!!!! Vendo la Iglesia!!!!!